- Presumiendo Nuevo Templete -
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viernes, noviembre 17, 2006
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Hola!!!!!!!!
Como ven, Niki me está construyendo un nuevo templete.
Aunque hemos tenido unas pocas de dificultades técnicas, espero que en los próximos dÃas se resuelvan.
Deceo que les guste, pero más que eso, que encuentren en mi blogg algún caso o cosa de interés o de pasatiempo que les resulte grato de leer.
Los quiero mucho.
Elena.
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- El Caso de la Mujer Colgada de las Barras del Tren -
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martes, noviembre 07, 2006
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Mi querida cuñada Lulú.
¡La mujer más pintoresca, peculiar y despistada del mundo!
Se estarán diciendo que que exagerada soy, pero esperense a ver uno de los muchos casos de mi cuñada y ustedes verán que todavÃa me quedo corta.
Mi suegra y mis dos cuñadas eran inseparables antes que Laura se casara, iban a todas lados juntas, ya saben; la tienda paseos etc. etc. Una tarde que regresaban de ir de compras les tocó pasar por una calle poco transitada, que tenÃa que cruzar las vias del tren.
Justo cuando iban llegando a el cruce de trenes, las barras comenzaron a bajar, por lo que Laura-que iba manejando- se detuvo para esperar que pasara el tren.
Esperaron y esperaron, y el tren no venÃa. Unos cuantos carros empesaron a llegar detrás de ellas y también esperaron y esperaron.
Despues de un buen rato comenzaron a impacientarse pues el tren seguÃa sin pasar. Los pasajeros de los pocos carros que estaban esperando y mi suegra y mis cuñadas intercambiaron miradas como diciendo-que pasa-y nadie entendÃa por que, si el tren no pasaba las barras siguieran abajo.
Laura le dijo a Lulú, que iba de pasajera.
Laura: -Lulú, bájate del carro y ve a ver si empujando las barras hacia arriba, se levantan.
Lulú: -estás loca, como voy a poder levantar las barras yo solita?.
Laura: -si puedes, tal vez las barras solo están atoradas.
Lulú: -yo no voy, que tal si se levantan en lo que estoy afuera del carro?
Laura: -no seas mensa, si se suben yo te espero hasta que te subas al carro.
Lulú: -no, que tal si...
D. Elena: -ándale Lulú, ve a ver, no nos vamos a pasar toda la noche aquÃ.
Lulú: de mala gana -OK-
Lulú se baja del carro y comienza a caminar hacia las vÃas del tren que por supuesto brillaba por su aucencia. Llega a donde están las barras y las comienza a tratar de levantar bajo la mirada atenta de todos los que ocupaban los carros que estaban parados esperando.
Lulú jaló las barras hacia arriba una y otra vez sin ningún resultado mientras Laura le gritaba desde el carro -jala más fuerte Lulú-. Lulú hizo unos cuantos intentos más cuando de repente las barras del tren comenzaron a levantarse. Las barras se siguieron levantando lentamente, pero sin parar, y Lulú comieza a subir con las barras gritando aterrorizada -Laura, Laura-
Laura y D. Elena, al ver que Lulú iba subiendo junto con las barras le empiesan a gritar con la cabeza fuera de la ventana, una por un lado y otra por el otro, -suéltate Lulú, suéltate- Los pasajeros de los demás carros, también asomados por sus ventanas, y que seguÃan con interés las incidencias de lo que hacÃa Lulú también comenzaron a gritar junto con mi suegra y mi cuñada, -suéltate Lulú, suéltate-.
Mientras, Lulú que ya iba para arriba y para arriba, colgada y miviendo las patitas desesperadamente, eso sÃ, con sus tacones altos, al oÃr todos esas voces que le gritaban que se soltara, finalmente se suelta y cáe al suelo.
Se levanta, y comienza a regresar al carro sacudiéndose las manos y la ropa llena de polvo, pero risa y risa y se da cuenta que Luara y su mamá estan riéndose a carcajadas por lo chusco de la situasión. Lulú se sube al carro y estando adentro se dan cuenta que a pesar de que las barras del tren ya están hasta arriba, ningún carro se ha movido. Voltean a ver que pasa y es que en todos los carros, la gente está muerta de la risa, y por eso nadie habÃa abanzado.
Continuarán las aventuras de Lulú la despistada.
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- CELEBRANDO EL AMOR -
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lunes, noviembre 06, 2006
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En nuestra familia acostumbramos celebrar todo y nada. Me explico; nos reunimos para celebrar cumpleaños, que a estas alturas son muy numerosos, quinceañeras, que han sido muchas, cafecito party, y hasta taquizas para celebrar el final de la novela del momento, pero este fin de semana nos reunimos para algo muy especial; para "Celebrar el Amor"
Si señores. Celebramos el amor de dos seres muy queridos para nosotros; mi hermano y mi cuñada. Hace 25 años, Alfredo y yo tuvimos el honor de ser testigos, ante Dios y ante los hombres de la boda de ellos.
Cabe mencionar que Alfredo y yo servimos de mediadores entre las dos familias, ya que por las razones que ya todos saben, mi papá y mi mamá no estaban muy de acuerdo en esa unión de modo que Alfredo y yo tuvimos que ir a pedir la mano de la chica de mi hermano.
Definitibamente no fué facil, especialmente en el momento en que me preguntaron por que razón estábamos mi esposo y yo, pidiendo la mano de la novia de mi hermano en lugar de mis papás. Tener que aceptar que mis papás tenÃan prejuicios porque ella (la chica) ya tenÃa un hijo y mis papás hubieran querido una mujer sin compromisos para su propio hijo fué algo muy dificil para mi. Sin embargo yo acepté ir, aún en contra de mis papás los cuales por años me reprocharon el haber sido la "celestina" de mi hermano.
No me importó ni mucho, ni poco, es decir, nada por la sencilla razón que desde entonces pude percibir el gran amor que habÃa entre ellos y claro que fuà su complice.
Hoy, sigo siendo testigo de ese mismo amor pero más grande, más maduro, más fuerte porque ha vivido todo lo que fortaleze al amor; penas, alegrÃas, enfermedades, tiempos muy dificiles y tiempos mas llevaderos. Ellos están concientes que siempre, siempre después de la tempestad, llega la calma.
Una Misa celebrada por el padre Helios, fué el momento emotivo en donde los dos renovaron sus votos matrimoniales, acompañados de sus hijos, yernos/nuera, nietos, y demás familia, además de algunos amigos. A petición de Sylvia, el Ave MarÃa estuvo a cargo de Maryita, quien cantó acapella ponindo en manos de nuestra madre santÃsima la felicidad de la pareja.
Despues de la ceremonia una rica taquiza vino a complacer nuestros paladares y nuestros estómagos, además de champurrado y aguas frescas. No cabe duda que nuestro taco placero no a podido ser remplazado por esa sosa comida "gringa".
Nuestra CELEBRACION DE AMOR fué todo un exito.
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